Los perros han sustituido a los cerdos
Una búsqueda de trufas es una experiencia única: sea testigo en directo de cómo interaccionan las personas y los perros. Las trufas son muy escasas y la mayoría de los buscadores de trufas prefieren trabajar solos para mantener a raya la competencia. Sin embargo, a algunos buscadores les gusta ir acompañados por amantes de las trufas cuando van en su busca. En el pasado, los buscadores solían emplear cerdos para que rastreasen el terreno. Se trataba de una táctica arriesgada ya que estos glotones animales a menudo acababan devorando el valioso bocado. Actualmente, la mayoría de los buscadores emplea perros entrenados que, gracias a su sensible olfato, son capaces de oler el fuerte aroma de las trufas a kilómetros de distancia.
Del hongo al preciado ingrediente
Durante la temporada de trufas, le resultará difícil encontrar un restaurante en el Piamonte que no ofrezca trufas en el menú. Por desgracia, este manjar se paga a precio de oro: un kilo de trufa blanca puede costar hasta 6.500 euros. La trufa es un producto muy escaso. Las trufas blancas y negras también reciben el nombre de oro blanco y negro. Pero no se deje amedrentar por el precio: el exclusivo e intenso sabor de la trufa es realmente excepcional. Pruebe con una cantidad muy pequeña: un poquito de trufa rayada en un plato de tagliatelle será un verdadero placer gustativo.
Pruebe las trufas en el mercado
Durante la temporada de trufas, encontrará una gran variedad de mercados de trufas en el Piamonte. En ellos se otorgan premios a las trufas más bonitas, más grandes y más sabrosas. Pruebe y compre una amplia variedad de productos locales hechos con trufa: desde aceite a miel, pasando por quesos y chocolates. El mercado de trufas más famoso del Piamonte se celebra en la localidad de Alba. Se trata de la feria de trufas más grande y prestigiosa de la región. Si tiene tiempo, reserve una degustación de vino y trufas, una oportunidad para probar exquisitos vinos y platos de trufas.